domingo, 1 de noviembre de 2009

Foucault Vigilar y Castigar

VIGILAR Y CASTIGAR
Vigilar Y castigar pertenece al género de la filosofía, y al subgénero de la criminología.
Es un ensayo sobre la evolución de los métodos de castigo y vigilancia desde la sociedad medieval a la contemporánea : los suplicios, la humillación pública, la cárcel, la escuela , los manicomios....
Foulcault inaugura una mirada genealógica de los procesos históricos desde el análisis de los castigos como expresión del poder .
El autor estudia la materialidad del poder desde sus extremidades “ se trata en cierto modo de una microfísica del poder que los aparatos e instituciones ponen en juego”
Busca intentar demostrar como las relaciones de poder pueden penetrar materialmente en el espesor mismo de los cuerpos.
El libro en cuestión esta dividido en cuatro partes, cada una de ellas a su vez esta
subdividida en capítulos, esta es la estructura que presenta :
-Suplicio:
• El cuerpo de los condenados
• La resonancia del poder
- Castigo:
• El castigo generalizado
• La benignidad de las penas
- Disciplina:
• Los cuerpos dóciles
• Los medios del buen encauzamiento
• El panoptismo
- Prisión:
• Unas instituciones completas y austeras
• Ilegalismos y delincuencia
• Los carcelario
El libro comienza hablando de Damiens , un hombre que fue condenado el 2 de marzo de 1757 a “pública retractación ante la puerta principal de París de la Iglesia de París” “donde debía ser llevado en una carretilla desnudo, y ahí le llevarían sobre un cadalso donde le atenazarían las tetillas, brazos, muslos y pantorrilas, y su mano derecha quemada con fuego de azufre , (puesto con esa mano había cometido el crimen), y sobre las partes atenazadas se le verterá plomo derretido, aceite hirviendo, pez resina ardiendo, cera y azufre fundidos juntamente, y a continuación, su cuerpo estirado y desmembrado por cuatro caballos y sus miembros y tronco consumidos en el fuego, reducidos a cenizas y sus cenizas arrojadas al viento”
Así es como Michel Foulcault comienza su ensayo, y a continuación nos describe escrupulosamente todos los altercados que ocurrieron, como por ejemplo los caballos nos estaban acostumbrados a tirar y tuvieron poner 6 caballos, pero por si esto no fuera suficiente, le cortaron los nervios y rompieron a hachazos las coyunturas para que los caballos pudieran desmembrarle, esto se conoce como suplicio , es la época en la que fue redistribuida en Europa y Estados Unidos toda una economía del castigo.
A finales del siglo XVIII y comienzos del XIX desaparece el cuerpo como blanco mayor de la represión, y a pesar de algunos grandes resplandores, la sombría fiesta punitiva está extinguiéndose, el castigo poco a poco ha cesado de ser teatro, la desaparición de los suplicios podría fecharse entorno a 1830-1848.
Ahora la tendencia era más hacia la privación de libertad, como podía ser la reclusión, los trabajos forzados, la deportación, penas que recaen directamente sobre el cuerpo, pero a un nivel más psicológico que físico, podría decirse que el castigo recae más sobre el alma que sobre el cuerpo
Es importante detenerse en el análisis de una cuestión y es que como el propio Foulcault señala , el objeto del crimen, es decir aquello sobre lo que se ejerce la práctica penal , ha sido profundamente modificado, antes , se juzgaba igual a un asesino que a un ladrón ( en el libro explica como dieron muerte a una mujer en el cadalso por robar 20 metros de tela ), posteriormente cuando se fue eliminando el suplicio, se encarcelaba siguiendo el mismo criterio, a asesinos, ladrones, vagabundos, niños vagos.... , y a continuación, se paso a clasificar a la gente, es decir, primera planta para asesinos, segunda para ladrones e.t.c.
Desde los 150 o 200 años que hace que en Europa se han establecido nuevos sistemas de penalidad, los jueces poco a poco se han propuesto juzgar otra cosa distinta del delito , que es el alma del delincuente.
Ahora se preocupan aparte del delito en si mismo, es decir del hecho, de si ha sido una reacción psicótica , episodio delirante. No ya sólo quien ha sido el autor de dicho delito sino cómo asignar el proceso causal que lo ha producida, qué medida será la más apropiada para la evolución del sujeto.
Esta nueva orientación de las penas contrasta con los medios del XVIII, donde lo primordial es que el condenado confiese, y sufra la imposición del poder sobre su cuerpo, todo esto claro está ante los ojos del pueblo, y finalmente termina con la exposición del cadáver en el lugar de su crimen, o en la misma posición que sus víctimas, ..... Era una reproducción casi teatral del crimen en la ejecución del culpable: los mismos instrumentos , los mismos gestos.
El papel del pueblo en este caso es ambiguo, por un lado se llama como espectador , ser testigo es un derecho que el pueblo reivindica, muchas veces el pueblo acompaña el suplicio con gritos e insultos al condenado, pero otras muchas, debido al horror y a la atrocidad de los suplicios , el pueblo apoya al condenado e incluso se revela, e intentan arrancar a este de las manos del verdugo.
Foulcault destaca que cuando el condenado esta apunto de morir puede decir lo que quiera por muy inmoral, o prohibido que este, y el pueblo lo aclama, se cambian los papeles, los criminales se convierten en héroes y las potencias en criminales.
Otra causa de agitación era la diferencia de las penas según las clases sociales, por ejemplo cuando se ejecutaba a criados con frecuencia había protestas, pero muchas veces a la gente de clase alta e incluso curas no se le aplicaba la misma pena que al resto de los criminales de clase inferior.
Podría decirse entonces que el suplicio cumple dos consecuencias una deseada y otra no deseada y por lo tanto no prevista. La consecuencia deseada es castigar al culpable haciendo caer sobre el todo el poder ante los ojos del pueblo, para que este vea cuan poderoso es el rey o el príncipe y lo que les pasará si actúan de igual o parecida forma, y la consecuencia no deseada es que el pueblo se siente más cerca que nunca de los criminales, e incluso los apoya, sienten pena por lo que les sucede y en ocasiones se revelan e intentan salvarlos( en ocasiones a determinados condenados se les convertía en una especie de santos) .Uno de los primeros clamores del pueblo fue para pedir la supresión de los suplicios.
Se desarrollo una literatura del crimen totalmente distinta, en la que el criminal aparecía glorificado.
Además no podemos olvidar que “si el pueblo se acostumbra a ver correr la sangre, pronto aprenderá que no puede vengarse si no corre sangre”
La protesta contra los suplicios se encuentra en la segunda mitad del siglo XVIII, entre los filósofos y los teóricos del derecho , entre juristas, curiales y parlamentarios , opinan que hay que castigar de otro modo, deshacer ese enfrentamiento físico del soberano con el condenado, muy pronto el suplicio se hace intolerable, dicen que en el peor de los asesinos , una cosa al menos es de respetar cuando se castiga se “ humanidad”, y ponen de manifiesto que a finales del siglo XVII disminuyeron los crímenes de sangre pero aumentaron los delitos contra la propiedad, los criminales de fin del XVII son “ hombres agotados, mal alimentados, dominados en absoluto por la sensación del instante, iracundos..”. En palabras del autor esta ocurriendo lo siguiente “ se afirma la necesidad de definir una estrategia y técnicas de castigo , la reforma penal ha nacido en el punto de conjunción entre la lucha contra el sobrepoder del soberano y la lucha contra el infrapoder de los ilegalismos conquistados y tolerados”
La semiotécnica con que se trata de armar el poder de castigar reposa sobre las siguientes premisas:
- El castigo no tiene que emplear el cuerpo sino la representación, lo que debe llevarse al máximo es la representación de la pena, no su realidad corporal
-Entre las penas y en la manera de aplicarlas en proporción a los delitos hay que elegir los medios que hagan en el ánimo del pueblo la impresión más eficaz y la más duradera y al mismo tiempo la menos cruel para sobre el cuerpo del culpable.
-Que estas leyes se publiquen y cada cual pueda tener acceso a ellas
-Es preciso que se redacte un código donde todas las infracciones están clasificadas, se trata de evitar que en el silencio de la ley, se precipita la esperanza de la impunidad, y la necesidad de una individualización de las penas, conforme a los caracteres singulares de cada delincuente.
Podría decirse que esto es la despedida a las viejas”anatomías ” punitivas, pero el autor a continuación se pregunta si realmente ha terminado la era de los castigos corporales.
En 1791 la nueva legislación criminal establece, que son necesarias unas relaciones exactas entre la naturaleza del delito y la del castigo, es decir , él que ha sido feroz en su crimen padecerá dolores físicos; el que haya sido holgazán se verá forzado a un trabajo penoso e.t.c, Este código también prevé la muerte para los traidores y asesinos; y todas las demás penas deben tener un término siendo el máximo 20 años.
Una de las principales diferencias es que antes el cuerpo del condenado pasaba a ser poder del rey, este imprimía todo su poder sobre el, en cambio ahora ha de ser un bien social, objeto de una apropiación colectiva y útil, de ahí el hecho de que los reformadores han propuesto siempre los trabajos públicos como una de las mejores penas posibles.
También se proponía una publicidad del castigo que no debía difundir el terror físico , sino más bien que sea el pueblo mismo el que pudiera contemplar las consecuencias de los delitos , por ello Le Peletier entre otros, propuso que el pueblo una vez al mes pudiera visitar a los condenados “ en su doloroso recinto” donde en la puerta de entrada a la celda aparecerá el nombre del condenado, su delito y su sentencia. En resumen se pretendía utilizar al criminal como elemento de instrucción.
Pero a pesar de esta reforma muchos legisladores no apoyan el encierro penal porque no responde a las especificidades de los delitos, conllevan grandes gastos y no producen ningún beneficio ni para la sociedad ni para las instituciones, a parte de esto criticaban que se daba el mismo remedio a todos los delitos, ya fueran crímenes , robos , holgazanería...
Dentro del tema del encierro penal, había reformadores que apoyaban la idea de que los presos vivieran en un aislamiento total, así se evitarían las malas compañías,( al juntar por ejemplo al asesino con el holgazán o el ladrón) las rebeliones, futuras colaboraciones fuera de la prisión, cambio de técnicas..., por lo que defendían que los presos no mantuvieran comunicación con nadie, y así estarían solos con su alma, y su conciencia y no les quedaría más remedio que reflexionar sobre su delito, y por otra parte están los reformadores que proponen los trabajos forzados, algo que es contrario totalmente a la idea del aislamiento total.
En torno a este debate, sobre el modo de encarcelamiento , hay dos modelos principales;
Por un lado esta el modelo inglés que agrega como condición indispensable para la corrección el aislamiento, y por otra parte el modelo de Filadelfia, el más famoso ya que aparecía unido a las innovaciones políticas, , proponía trabajo obligatorio en talleres , ocupación constante de los presos, financiación de la prisión por este trabajo, pero también la retribución individual de los presos para garantizar su reinserción moral y material .
Otra de las innovaciones es que la sentencia y lo que la motivó deben ser conocidos por todos , pero en cambio la ejecución de la pena debe cumplirse en secreto, el público no tiene porque intervenir en eso.
Después de ahondar en este tema el autor pasa a reflexionar sobre la docilidad de los cuerpos, se ocupa sobre todo de la forma en la que la sociedad ordena y controla los individuos adiestrando sus cuerpos, como se instruye a la gente para que ejerzan determinadas profesiones, como se puede hacer de un hombre completamente normal un soldado profesional.
El autor nos dice que en la segunda mitad del siglo XVIII el soldado se ha convertido en algo que se fabrica, y que ha habido en el curso de la edad clásica, todo un descubrimiento del cuerpo como objeto y blanco de poder.
Ahora se preocupan no ya por e lenguaje del cuerpo o los elementos sino por la eficacia del movimiento , su organización interna.
El cuerpo humano entra en un mecanismo de poder que lo explora , lo desarticula y lo recompone, es una anatomía política que es igualmente una mecánica del poder, define como se puede hacer presa en el cuerpo de los demás , no simplemente para que ellos hagan lo que se desea , sino para que operen como se quiere, con las técnicas, según la rapidez y la eficacia que se determina.
Para ello la disciplina se convierte en una pieza fundamental, aparte del control de la actividad ,que procede ante todo a la distribución de los individuos en el espacio, y para ello propone varias técnicas :
• Clausura: en los colegios el modelo de convento se impone poco a poco, el internado aparece como el régimen de educación más frecuente, pero este principio no es constante ni indispensable “ a cada individuo su lugar; y en cada emplazamiento un individuo”
• El empleo del tiempo: se busca sobre todo asegurar la calidad del tiempo empleado
• El establecimiento de correlación del cuerpo y del gesto: El control disciplinario no consiste sólo en enseñar o imponer una serie de gestos definidos; impone la mejor relación entre un gesto y la actitud global del cuerpo, que es su condición de eficacia y de rapidez . En el buen empleo del cuerpo que permite un buen empleo del tiempo nada debe permanecer ocioso o inútil.
• La utilización exhaustiva: El empleo del tiempo debía conjugar el peligro de derrocharlo , falta de moral y falta de honradez económica , se trata de extraer del tiempo cada vez más instantes disponibles, se enseña la rapidez como una virtud.
Esto es un aprendizaje corporativo, donde se establece una relación de dependencia individual y total a la vez respecto del maestro.
A continuación Foulcaut nos habla de los medios del buen encauzamiento, es decir aquellos medios para intentar que la sentencia y el modo de llevarla a cabo sean lo más correctas posibles, y permitan vigilar al individuo a la vez que se intenta “reformarlo”, puesto que una de las funciones del poder disciplinario es la de “enderezar conductas”
El ejercicio de la disciplina supone un dispositivo que coacciona por el juego de la mirada, lo que llevo en la época clásica a construir “observatorios”, donde las miradas deben ver sin ser vistas, el viejo esquema simple de la clausura y del encierro (el muro, y la puerta que impide entrar o salir) comienzan a ser sustituidos por el cálculo de las aberturas, se pretende especificar la vigilancia y hacerla funcional.
Se impone el castigo disciplinario de índole correctivo, donde se utiliza un sistema de gratificación-sanción , la justicia escolar ha llevado muy lejos este sistema, precisamente en le ámbito escolar se impone la distribución según los rangos o grados, cuyo papel consiste en señalar las desviaciones, jerarquizar las cualidades y recompensar, permitiendo así los ascensos, ganar rangos y puestos, y castigar haciendo retroceder o degradándolo.
La penalidad perfecta que atraviesa todos los puntos , y controla todos los instantes de las instituciones disciplinarias, compara , diferencia, jerarquiza, homogeniza, excluye. En una palabra normaliza. Aparece a través de las disciplinas el poder de la norma.
Posteriormente nos habla del panóptico de Bentham, es una figura arquitectónica, que cumple la función de cárcel, se sitúa en la periferia, tiene forma de anillo, en el centro hay una torre donde se encuentra el personal de seguridad cuya función es vigilar a los presos, alrededor de la torre el edificio está dividido en celdas, y encada celda, un enfermo, un loco, un condenado, un escolar, un obrero...
En suma se invierte el principio del calabozo, o más bien de sus tres funciones que son encerrar, privar de luz y ocultar, no se conserva más que la primera y se suprimen las otras dos. La plana luz y la atenta mirada de un vigilante captan mejor que la sombra, que en último termino protegía. La visibilidad es una trampa., de ahí el efecto del panóptico: inducir en el detenido un estado consciente y permanente de visibilidad que garantiza el funcionamiento automático del poder. Se prueban diferentes castigos sobre los condenados , según sus delitos y su carácter y se buscan los más eficaces, también se intentan experimentos pedagógicos , e incluso es una experiencia de control, puesto que desde la torre central el director puede vigilar o espiar a todos los empleados.
Pero no hay que olvidar que la extensión de las instituciones disciplinarias no es, sin duda , otra cosa que el aspecto más visible de diversos procesos más profundos
La prisión , pieza esencial en el arsenal punitivo, marca seguramente un momento importante en la historia de la justicia penal: su acceso a la “humanidad”,es la pena de las sociedades civilizadas, Michel Foulcaut explica reflexiona la evidencia de la privación de la libertad: “ ¿ Cómo podría dejar de ser la prisión la pena por excelencia en una sociedad en que la libertad es un bien que pertenece a todos de la misma manera y al cual está apegado cada uno por un sentimiento universal y constante? Su pérdida tiene pues, el mismo precio para todos, mejor que la multa, la prisión es el castigo igualitario”.
Podría definirse la prisión como un cuartel un tanto estricto, una escuela sin indulgencia, es la forma más inmediata y más civilizada de todas las penas.
En suma, el encarcelamiento penal, desde el principio del siglo XIX, ha cubierto a la vez la privación de la libertad y la transformación técnica de los individuos, una prisión debe ser un aparato disciplinario exhaustivo, que da un poder casi total sobre los detenidos, es una disciplina despótica. Foulcaut se pregunta: ¿ Cual es la utilidad del trabajo del penal?, la verdadera respuesta es la constitución de una relación de poder, de una forma económica vacía , de un esquema de la sumisión individual y de su ajuste a un aparato de producción, y también suele convertirse en un instrumento de modulación de la pena.
Se introduce el interes no sólo ya por el delito, sino por el qué lo ha llevado a cometerlo, se investiga en su vida, en sus relaciones con los demás, su familia, su entorno, su trayectoria..... Esta investigación biográfica es una parte esencial de la instrucción judicial, es muy importante en la historia de la penalidad porque hace existir al criminal antes del crimen.
“El paso de los suplicios con su ceremonia del dolor, a unas penas de presiones practicadas en arquitecturas masivas y guardadas por el secreto de las administraciones, no es el paso a una penalidad indiferenciada , abstracta y confusa, es el paso de un arte de castigar a otro, no menos sabio que él”
Se puede decir que la prisión en sus efectos visuales y sobre la realidad ha fracasado, muchos de los objetivos que se pretendían alcanzar no se han conseguido, y recibe duras críticas por ello:
• Reducir el numero de delitos :paradójicamente en vez de disminuir estos han aumentado. Es un hecho comprobado que los detenidos se vuelven reincidentes, y con esto se va al traste la teoría de la prisión como instrumento de reinserción.
• Favorece la organización de delincuentes: construyendo entre ellos solidaridad, están jerarquizados, favorece también que los más torpes aprendan de los más hábiles a eludir a la ley, y el fruto de que hayan estado juntos (que si no hubiera sido por la prisión que en definitiva es la que los ha juntado) puede se las complicidades futuras fuera del ámbito de la prisión,
• Fabrica delincuentes: Puesto que indirectamente, hace caer en la miseria a la familia del detenido.
Pero precisamente para intentar corregir estos fallos o problemas, se han creado unas máximas de la buena “condición penitenciaria” que son:
• Principio de corrección: Uno de los principales objetivos de la detención penal, por no decir el primordial, es la transformación del comportamiento del individuo.
• Principio de modulación de las penas: Las penas deben de poder modularse para así ajustarse a la individualidad de los detenidos.
• Principio de clasificación: Deben estar aislados y repartidos según la gravedad penal de su acto
• Principio del trabajo como derecho y como obligación: Esto les permite aprender un oficio y procurar recursos a su familia
• Principio de educación penitenciaria: Sólo la educación puede servir como auténtico instrumento penitenciario.
• Principio de las instituciones anejas: La prisión debe ir seguida de medidas de control y asistencia, para conseguir así más fácilmente la readaptación del individuo en la sociedad.
Y así es como Foulcaut termina su ensayo, hablando de las máximas que debe seguir la institución penitenciaria, y reflexionando sobre el papel actual de la prisión ,

lunes, 20 de abril de 2009

Que es un mito?

Descripción general

Los mitos forman parte del sistema religioso de una cultura, la cual los considera historias verdaderas. Su función es otorgar un respaldo narrativo a las creencias centrales de la comunidad.

Según Mircea Eliade, el mito es una historia sagrada que narra un acontecimiento sucedido durante un tiempo primigenio, en el que el mundo no tenía aún su forma actual. Los acontecimientos de la naturaleza que se repiten periódicamente se explican como consecuencia de los sucesos narrados en el mito (por ejemplo, en la mitología griega el ciclo de las estaciones se explica a partir del rapto de Perséfone).

Según la visión de Lévi-Strauss, uno de los estudiosos más influyentes del mito, a todo mito lo caracterizan tres atributos:

  • trata de una pregunta existencial, referente a la creación de la Tierra, la muerte, el nacimiento y similares.
  • está constituido por contrarios irreconciliables: creación contra destrucción, vida frente a muerte, dioses contra hombres.
  • proporciona la reconciliación de esos polos a fin de conjurar nuestra angustia.

Como los demás géneros tradicionales, el mito es en origen un relato oral, cuyos detalles varían a medida que es transmitido de generación en generación, dando lugar a diferentes versiones. En las sociedades que conocen la escritura, el mito ha sido objeto de reelaboración literaria, ampliando así su arco de versiones y variantes.

Desde que en la Antigüedad grecolatina las explicaciones filosóficas y científicas entraron en competencia con las míticas, la palabra mito se cargó en ciertos contextos de un valor peyorativo, llegando a utilizarse de forma laxa como sinónimo de patraña, creencia extendida pero falsa: p.ej., la sociedad sin clases es un mito comunista, o la mano invisible del mercado es un mito liberal. También es común el uso un tanto laxo de mito y mítico (o leyenda y legendario) para referirse a personajes históricos o contemporáneos (o incluso a productos comerciales) cargados de prestigio y glamour: Charlot es un mito del cine mudo; los Beatles son un grupo mítico.


Etimología de la palabra 'mito'

La palabra "" deriva del griego mythos, que signfica "palabra" o "historia". Un , tendrá un significado diferente para el creyente, para el antropólogo, o para el filólogo. Esa es precisamente una de las funciones del mito: consagrar la ambigüedad y la contradicción. Un no tiene por qué transmitir un mensaje único, claro y coherente.

La mitología no es sino una alternativa de explicación frente al mundo que recurre a la metáfora como herramienta creativa. Entonces, los relatos se adaptan y se transforman de acuerdo a quién los cuenta y el contexto en el que son transmitidos. Los mitos no son dogmáticos e inmutables sino que son fluídos e interpretables.

Estructura del relato mítico

El tiempo mitológico se diferencia del tiempo cronológico porque es una suerte de "tiempo fuera del tiempo". Esto supone una estructura muy particular, que refiere a una edad de oro o tiempo primoridial. Diría Mircea que es un tiempo cíclico y lo llamará "el mito del eterno retorno".

Clic aca para saber mas sobre la estructura del relato mitico.

Cómo interpretar un mito?

La ambigüedad del discurso mítico, a diferencia de la fábula, propone una lectura alegórica mucho más difícil de objetivar. Pero esta aparente dificultad de interpretación es, una gran oportunidad a la hora de proponer una instancia de : la riqueza fascinante de los personajes y los mundos descriptos, los hacen especialmente atractivos.

Podemos analizar los mitos históricamente, estudiar su significación de acuerdo a lo que éstos representaba para su propia tradición en el momento en que estuvieron en apogeo. Pero también podemos proponer una nueva lectura, una actualización, utilizándolos como excusa para abordar un problema desde un nuevo ángulo, para revisar conclusiones, para discutir e intercambiar ideas.

Los contenidos mitológicos, inspiran, motivan, despiertan. Proponemos, entre otras cosas, utilizar los mitos como original recurso didáctico propiciando la relfexión y el debate.

Ir a Mitos para Reflexionar


TAREA



1) Profundice y amplie su lectura sobre el tema
2) Encuentre ejemplos de "mitos" que se desarrollen en el sistema educativo o que tengan vigencia en la vida escolar. Recuerde que el mito que usted elija debe respetar la estructura del relato mítico.
3) Una vez finalizado los puntos anteriores, investigue sobre "Los Filosofos Presocráticos", utilice el siguiente cuadro de ayuda, y reflexione sobre la importancia de las obras de los primeros filósofos.

sábado, 7 de junio de 2008

Video explicativo de La alegoría de la Caverna

http://www.youtube.com/watch?v=nxVwsKNv08Q&eurl=http://www.xtec.es/~asarbach/actius/filosofia%20II/Antigua/platon2conocimiento.htm

Ese es el link directo para ver el video explicativo del mito de la caverna.

Esta muy bueno, a mi me ayudo a entender mucho mejor el texto.

Saludos... nos vemos en clases!

jueves, 22 de mayo de 2008

Entrevista a Fernando Savater del portal EDUCAR

Educar es un acto de coraje

Fernando Savater.

El tórrido verano de San Sebastián -su ciudad natal española perteneciente al País Vasco- lo tiene sin cuidado. Entrevistado por educ.ar en agosto de 2000, Fernando Savater se muestra más preocupado por la acción terrorista de la ETA y la situación de riesgo que atraviesan las personas que han sido amenazadas.

Esa inquietud se suma, no obstante, a muchas otras que lo obsesionan en relación con los desafíos mundiales que plantea el futuro inmediato, marco en el cual Savater subraya, una vez más, el papel -a su juicio, fundamental- que debe jugar la educación. El autor de El valor de educar habla, además, desde su rol de filósofo. Asegura que si bien siguen planteados los eternos interrogantes de siempre -quiénes somos, de dónde venimos, hacia dónde vamos-, surgen en el presente nuevas preguntas relacionadas con la existencia o no de vida en otros planetas, la irrupción de la genética o el desafío planteado por enfermedades como el sida.

P: ¿Sigue siendo optimista en cuanto al rol que desempeña la educación? R: Sigo siendo una persona que no ve alternativas al rol fundamental que cumple la educación. No es que piense que lo puede resolver todo. Pero entiendo, como ya lo he dicho en mi libro El valor de educar, que la mayoría de nuestros problemas podrían empezar a solucionarse en ese campo. Desgraciadamente hay poco espacio real para el optimismo ya que, como todos sabemos, la educación es un servicio caro, complejo y que genera todo tipo de dificultades en muchos países. Y en América latina, para no hablar de las naciones africanas, esas dificultades son graves. Para concluir en este punto: no es que yo piense que la educación nos llevará al reino celestial, sino que sinceramente no sé cómo podrían mejorarse realmente las condiciones del mundo sin pasar primero por mejorar la educación.

P: A veces ocurre que los propios docentes se muestran desganados o poco estimulados. ¿Nota que se den clases de una manera ciertamente rutinaria o burocrática?

R: Sí, y con no poca frecuencia los profesores nos quejamos de que nuestros alumnos son apáticos o faltos de motivación. Pero deberíamos darnos cuenta de que somos nosotros los que tenemos la función de motivarlos. Si los alumnos ya estuvieran entusiasmados, nosotros sobraríamos. Bastaría con recomendarles un libro o que se metan a navegar por internet. Justamente porque las cosas no funcionan de ese modo hacen falta docentes buenos, de carne y hueso, que no se limiten a transmitir conocimientos sino a motivar. Es obvio que eso no puede hacerlo un burócrata o un señor muy apegado a la rutina. La educación es un acto de coraje y no es aconsejable para cobardes. No hay que olvidar, de todos modos, que todos los docentes somos seres humanos y muchas veces estamos abrumados por las burocracias, por los bajos presupuestos y por la falta de comprensión de la sociedad hacia nosotros. Pero aun así actuamos, en la mayoría de las veces, con una escondida fe en lo que hacemos.

P: ¿Su fe se extiende al futuro del mundo en general?

R: En cierto sentido sí. Si bien nadie puede creer en un futuro radiante tal como están las cosas, al menos creo que es posible producir mejoras en ciertos aspectos. Con esfuerzo tal vez se podrían erradicar ciertas plagas, amortiguar el hambre y las guerras. Claro que con cada solución aparecen nuevos problemas. Las mismas intervenciones biogenéticas que pueden dominar ciertas enfermedades son capaces de generar otras nuevas.

P: El político y escritor italiano Antonio Gramsci creía que el optimismo de la voluntad solía ir acompañado del pesimismo de la inteligencia...

R: Coincido básicamente con esa idea; la inteligencia puede darse el lujo de comprender esto que venía diciendo sobre las mejoras que traen nuevas dificultades. Pero la voluntad no puede sino ser optimista.

P: ¿Qué relación mantiene con internet?

R: Soy algo torpe con ella y la uso mal. Me parece que hoy la red de redes es más que nada un gran entretenimiento. Y el 90 por ciento de lo que circula por internet es publicidad comercial. Yo la uso apenas para buscar cosas concretas. Y lo hago, claro, en la medida de mis posibilidades, que son pequeñas debido, como ya he dicho, a mi torpeza en ese campo.

P: Busca datos pero elude la navegación...

R: Para navegar prefiero los libros, los sueños y los barcos. De todos modos pienso que internet puede y debe incorporar más a los estudiantes. No porque la red tenga una virtud educativa intrínseca, sino porque es un poderoso instrumento, una enciclopedia virtual al alcance de mucha gente. Aun así sigo resaltando el valor de la persona real que enseña a individuos reales. La alternativa, si no, es la soledad, el individualismo, el saber por el saber.

P: ¿A la larga ese aislamiento puede resultar peligroso?

R: Es posible. Pero hasta ahora la humanidad ha sido muy individualista y no ha desaparecido por eso. Incluso el egoísmo puede comprender también una necesidad de colaboración. Porque así como hay un egoísmo obtuso que no entiende lo que verdaderamente conviene a la mayoría, existe también una forma de egoísmo que entiende que el ser humano es un ser social, que la vida en sociedad exige una imaginación colectiva y una preocupación por los demás.

P: ¿Cree que con el sida el amor ha quedado resentido?

R: No lo veo así. Ni el amor ni el sexo están dando señales de retirada. A veces se abren más, a veces se cierran; hay nuevos reglamentos, sí, tanto en el terreno higiénico como en el ideológico. No creo, sin embargo, que las relaciones sexuales o amorosas en general se limiten por este tema o que vayan a acotarse en el futuro. P: ¿Cuáles fueron los grandes amores de su vida? R: Yo formo parte de una familia muy unida, muy cordial; tanto mis padres como mis hermanos han sido muy importantes en mi vida afectiva. He tenido también amores y compañías fugaces que han sido muy gratos y decisivos en mi vida. Tengo, además, un hijo, Amador , que para mí representa a esos amores que implican tareas, responsabilidades. Y después están los amores más abstractos: los amores literarios, mi pasión por los caballos. Mi ración de amor está bastante colmada. P: ¿De dónde nace su pasión por el turf ? R: Mi padre ya la tenía y yo la adquirí cuando cumplí cinco años. Actualmente estoy escribiendo, justamente, un libro sobre esto, sobre las carreras y los hipódromos de todo el mundo. El libro se inicia y se cierra con un texto sobre el Premio Carlos Pellegrini , que se disputa cada año en Buenos Aires. P: ¿Qué es lo que más le interesa de las carreras? R: Me interesa el ritual, el esfuerzo, el pura sangre como obra de arte y ese mundo también literario donde intervienen el juego, el esfuerzo, el riesgo y la pasión. Todo eso pasa en una carrera. P: Muchas veces los humanos parecemos caballos en plena carrera... R: Pues claro, y vaya si hay obstáculos que superar. Algunos sólo piensan en ganar. Yo creo que el ser humano no debería vivir obsesionado por una victoria definitiva. Hay un poema muy hermoso del poeta checo Rainer María Rilke en el que se pregunta: "¿Quién habla de triunfo? ¿Quién dice victoria? Eso no es todo". Pienso lo mismo. Supongo que aprender a vivir una vida compartida, con sus satisfacciones escalonadas en cada momento, es mucho mejor que soñar con una gran victoria a partir de la cual, dicho sea de paso, quedaríamos vacíos. P: Como cuando se creía que el mundo marchaba hacia una liberación total. R: Exacto. Y aún hoy existe gente según la cual llegar a la plenitud es poseer tanto dinero como Bill Gates. P: ¿Qué piensa al respecto? R: Que debemos conseguir entre todos una vida terrenal más humana y solidaria y menos cruel que la presente.

P: ¿Es difícil filosofar en un mundo fascinado por las preguntas prácticas? R: Lo difícil es reflexionar de una manera independiente. Un amigo mío opina que cuando alguien dice "yo pienso" o "yo creo" debería decir "yo repito". Daría la impresión de que pensar hoy en día es básicamente citar a otro. Y eso a mí no me interesa. Tampoco me importa la filosofía concebida como un lenguaje privado de un grupo de profesores especializados. P: ¿A qué apunta usted como filósofo? R: A moverme en un ámbito reflexivo y constante sobre la vida, a no quedarme solamente en lo instrumental. No es que no me divierta leer un debate académico que, con gran sutileza, discuta un buen texto de Kant . Pero lo que más me atrae es encontrar el sentido último de las cosas. P: ¿Cree que las preguntas de hoy continúan siendo las mismas de siempre? R: Algunas lo son, otras son nuevas. La pregunta sobre si hay vida en otros planetas no pudo realizarse en la Edad Media. Preguntarse en qué consiste la carga genética que nos transmitimos también es una novedad. Después, claro, los temas eternos: la vida, la muerte, la justicia, la soledad del hombre y el sentido de la vida.

P: ¿Cree usted que la vida tiene, intrínsecamente, un sentido, más allá del que cada uno le pueda dar a la propia?

R: No sin nosotros. Lo que nos da sentido es, precisamente, la misma vida. Lo que no tiene sentido es preguntarnos cuánto mide el metro con el cual medimos ese sentido, porque no existe un modelo único de existencia. La vida fuera de nosotros no tiene sentido. Pero para nosotros sí lo tiene.

P: ¿Qué cosas le dan placer?

R: Soy una persona de gustos sencillos. Disfruto de una buena comida, de un amanecer, de fumar buenos cigarros, de leer un libro, de un buen vaso de vino blanco. No soy nada rebuscado.

P: ¿Tiene alguna imagen formada de los argentinos?

R: Por suerte, ninguna. Del mismo modo espero que los argentinos no tengan una idea formada de los españoles. Tengo en ese país buenos amigos, gente concreta en la que pienso cuando escucho un tango o recuerdo mis paseos por el hipódromo de Palermo. Pero la verdad es que nunca me gustaron los arquetipos .

Enlaces a sitios de interés

Sitio que reproduce el discurso completo que pronunció Fernando Savater al ser distinguido -dos años atrás en una universidad venezolana- con el título Honoris Causa. Allí el pensador se define como un "infiltrado" en el mundo universitario, un espía que trae vientos y voces de otros ámbitos. La disertación es extensa pero sustanciosa.

Prólogo al libro El valor de educar

Carta a la maestra

Célebre ensayo de Fernando Savater (Ariel, 1997) donde se intenta responder qué es la educación, qué esperamos de ella y si su razón de ser estriba meramente en transmitir conocimientos o implica también formar ciudadanos libres y criteriosos para vivir en democracia. El libro aborda también la tensión entre disciplina y libertad, el eclipse de las humanidades, los límites de la neutralidad escolar, el papel de la familia, la formación moral y su relación con el sexo. Savater completa su trabajo con una breve antología de textos filosóficos y escritos diversos sobre el tema educativo. El valor de educar se abre con una carta dirigida a una maestra y se cierra con otra destinada a una ministra de la cartera educativa.

Permíteme, querida amiga, que inicie este libro dirigiéndome a ti para rendirte tributo de admiración y para encomendarte el destino de estas páginas. Te llamo "amiga" y bien puedes ser desde luego "amigo", pues a todos y cada uno de los maestros me refiero: pero optar por el femenino en esta ocasión es algo más que hacer un guiño a lo políticamente correcto. Primero, porque en este país la enseñanza elemental suele estar mayoritariamente a cargo del sexo femenino (al menos tal es mi impresión: humillo la cerviz si las estadísticas me desmienten); segundo, por una razón íntima que queda aclarada suficientemente con la dedicatoria de la obra y que quizá subyace, como ofrenda de amor, al propósito mismo de escribirla.

En lo tocante a la admiración, tampoco hay pretensión de halago oportunista. Vaya por delante que tengo a maestras y maestros por el gremio más necesario, más esforzado y generoso, más civilizador de cuantos trabajamos para cubrir las demandas de un Estado democrático. [...]

Actualmente coexiste en este país -y creo que el fenómeno no es una exclusiva hispánica- el hábito de señalar la escuela como correctora necesaria de todos los vicios e insuficiencias culturales con la condescendiente minusvaloración del papel social de maestras y maestros. ¿Que se habla de la violencia juvenil, de la drogadicción, de la decadencia de la lectura, del retorno de actitudes racistas, etc.? Inmediatamente salta el diagnóstico que sitúa -desde luego no sin fundamento- en la escuela el campo de batalla oportuno para prevenir males que más tarde es ya dificilísimo erradicar. Cualquiera diría por lo tanto que los encargados de esa primera enseñanza de tan radical importancia son los profesionales a cuya preparación se dedica más celo institucional, los mejor remunerados y aquellos que merecen la máxima audiencia en los medios de comunicación. Como bien sabemos, no es así. La opinión popular (paradójicamente sostenida por las mismas personas convencidas de que sin una buena escuela no puede haber más que una malísima sociedad) da por supuesto que a maestro no se dedica sino quien es incapaz de mayores designios, gente inepta para realizar una carrera universitaria completa y cuya posición socioeconómica ha de ser -¡así son las cosas, qué le vamos a hacer!- necesariamente ínfima. Incluso existe en España ese dicharacho aterrador de "pasar más hambre que un maestro de escuela"... En los talking-shows televisivos o en las tertulias radiofónicas rara vez se invita a un maestro: ¡para qué, pobrecillos! Y cuando se debaten presupuestos ministeriales, aunque de vez en cuando se habla retóricamente de dignificar el magisterio (un poco con cierto tonillo entre paternal y caritativo), las mayores inversiones se da por hecho que deben ser para la enseñanza superior. Claro, la enseñanza superior debe contar con más recursos que la enseñanza... ¿inferior? [...]

No soy amigo de convertir la reflexión en lamento. Mi actitud, nada original desde los estoicos, es contraria a la queja: si lo que nos ofende o preocupa es remediable debemos poner manos a la obra y si no lo es resulta ocioso deplorarlo, porque este mundo carece de libro de reclamaciones. Por otra parte, estoy convencido de que tanto en nuestra época como en cualquier otra sobran argumentos para considerarnos igualmente lejos del paraíso e igualmente cerca del infierno. Ya sé que es intelectualmente prestigioso denunciar la presencia siempre abrumadora de los males de este mundo pero yo prefiero elucidar los bienes difíciles como si pronto fueran a ser menos escasos: es una forma de empezar a merecerlos y quizá a conseguirlos...

En el caso de un libro sobre la tarea de educar, empero, el optimismo me parece de rigor: es decir, creo que es la única actitud rigurosa. Veamos: tú misma, amiga maestra, y yo que también soy profesor y cualquier otro docente podemos ser ideológica o metafísicamente profundamente pesimistas. Podemos estar convencidos de la omnipotente maldad o de la triste estupidez del sistema, de la diabólica microfísica del poder, de la esterilidad a medio o largo plazo de todo esfuerzo humano y de que "nuestras vidas son los ríos que van a dar a la mar, que es el morir". En fin: lo que sea, siempre que sea descorazonador. Como individuos y como ciudadanos tenemos perfecto derecho a verlo todo del color característico de la mayor parte de las hormigas y de gran número de teléfonos antiguos, es decir, muy negro. Pero en cuanto educadores no nos queda más remedio que ser optimistas, ¡ay! Y es que la enseñanza presupone el optimismo tal como la natación exige un medio líquido para ejercitarse. Quien no quiera mojarse, debe abandonar la natación; quien sienta repugnancia ante el optimismo, que deje la enseñanza y que no pretenda pensar en qué consiste la educación. Porque educar es creer en la perfectibilidad humana, en la capacidad innata de aprender y en el deseo de saber que la anima [...] Con verdadero pesimismo puede escribirse contra la educación, pero el optimismo es imprescindible para estudiarla... y para ejercerla. Los pesimistas pueden ser buenos domadores pero no buenos maestros. [...] Cobardes o recelosos, abstenerse. Lo malo es que todos tenemos miedos y recelos, sentimos desánimo e impotencia y por eso la profesión de maestro -en el más amplio sentido del noble término, en el más humilde también- es la tarea más sujeta a quiebras psicológicas, a depresiones, a desalentada fatiga acompañada por la sensación de sufrir abandono en una sociedad exigente pero desorientada. De ahí nuevamente mi admiración por vosotras y vosotros, amiga mía. [...]

Nota biográfica de Fernando Savater

El pensador español Fernando Savater.

Fernando Savater nació en San Sebastián, España, en 1947. Es filósofo, ensayista, narrador, dramaturgo y polemista. Se desempeña como catedrático de Ética en la Universidad del País Vasco y como catedrático de Filosofía en la Universidad Complutense de Madrid. Codirige, además, junto a Javier Pradera, la revista Claves de razón práctica y colabora frecuentemente con columnas periodísticas en el diario El País de Madrid y en otros medios internacionales. El valor de educar, La infancia recuperada y Ética como amor propio son algunos títulos destacados de su abundante producción ensayística. Fue finalista del Premio Planeta con su novela El jardín de las dudas y recibió, entre otras distinciones, los premios Anagrama de Ensayo y Nacional de Ensayo, de España.

Notas

Amador

Único hijo de Fernando Savater. Tiene 21 años y es, como el propio padre lo describe, "muy grande, muy gordo y corpulento". El escritor le dedicó especialmente dos libros: Ética para Amador (Ariel, 1992) y Política para Amador (Ariel, 1993 ). Ambos volúmenes surgieron de largas charlas mantenidas con su hijo. La intención confesa del autor fue hacer dos libros destinados al público adolescente, hacia el cual dirige con frecuencia buena parte de sus famosas lecciones de ética.

Turf

El vocablo alude al deporte y juego de apuestas que se genera en torno de las carreras de caballos. También se lo usa para referirse al terreno o pista donde suelen realizarse esos certámenes.

Premio Carlos Pellegrini

Todos los años, en el hipódromo argentino de Palermo (un barrio de Buenos Aires, Argentina), se realiza una carrera de caballos muy especial y esperada que lleva el nombre de Carlos Pellegrini. Se le dio ese nombre en homenaje a quien fue vicepresidente de la Argentina entre 1886 y 1890. Luego, tras la renuncia de Juárez Celman, Pellegrini ejerció la presidencia desde 1890 hasta 1892. Se le debe, entre otras iniciativas, la fundación del Banco de la Nación Argentina. Vivió entre los años 1800 y 1875. La citada carrera es considerada como la más importante del año en el mundo del turf.

Kant

Immanuel Kant. Filósofo alemán nacido en 1724 y muerto en 1804. Fundó el idealismo crítico y trascendental. En su carácter de astrónomo concibió una hipótesis cosmogónica que explica el origen del sistema planetario a partir de una nebulosa inicial. Entre 1770 y 1790 escribió Crítica de la razón pura, Crítica del juicio y Crítica de la razón práctica, obras en las que proclamó su carácter agnóstico -reacio a la explicación religiosa de los hechos del universo- y en las que dedujo que las cosas sólo se conocen a través de la experiencia. Kant reconocía que Dios era un postulado necesario para sostener la fe pero que su existencia era indemostrable. Se burló incluso de la inclinación que sus contemporáneos sentían por la mística y estableció la objetividad de los principios de la ciencia.

Arquetipo

Modelo ideal o prototipo perfecto en su especie, grupo o género. La palabra es utilizada usualmente para designar tanto a una figura señera de la humanidad (el Mahatma Gandhi, la Madre Santa Teresa de Jesús, el físico Albert Einstein) como a obras de arte e incluso modelos de automóviles u otros productos de consumo. El vocablo suele ser utilizado, también, para encerrar a una persona en una serie fija de valores perfectos, ideales y virtualmente inamovibles. En este sentido el término puede denotar un significado negativo, frío y deshumanizado.

texto: Luis Gruss

lunes, 19 de mayo de 2008

Problemas Filosoficos

Sería interesante que desde cada orientacion, o desde la fundamentación se pudiera responder a estos interrogantes...

¿Cuáles son los problemas filosóficos que afectan o podrían afectar a un docente (de EF - Inglés - Especial) ? ¿De qué cosas debe ocuparse la filosofía o el filósofo en la actualidad? ¿Qué filosofos contemporáneos conocen?

Debemos ser capaces de poder reflexionar sobre la filosofía y la pedagogía.
Hasta la próxima...

viernes, 9 de mayo de 2008

Los partidos de futbol y la Oralidad Primaria

En las páginas siguientes analizaremos una serie de características propias del relato radial de los partidos de fútbol que coinciden con algunos supuestos presentes en los estudios realizados acerca de la Oralidad.

Por lo tanto, intentaremos sintetizar los estudios realizados acerca de la Oralidad, basados en los poemas homéricos, en los de los filósofos presocráticos y también en ciertas producciones rituales de grupos étnicos que aún se encuentran en estados culturales pre-escriturales y relacionarlos con los relatos de fútbol, con el propósito de establecer cuáles son los variables que pueden aplicarse a estos últimos y poder entonces estudiarlos a la luz de las teorías respectivas.

Comenzaremos, por lo tanto, definiendo a la oralidad como una verdadera forma de expresión correspondiente a una forma de "pensar oral" que tiene diferencias marcadas con un "pensar textual".

Havelock (1986) destaca los conceptos de Jossue (1925) acerca de una cultura verbomotriz "...en contraposición al lenguaje categorial y estático característico de la alfabetización consumada".

Esta cultura verbomotriz, cuyas características comenzaron a profundizarse a partir de los estudios de Milman Parry de los poemas homéricos, estaba basada en el arte de la improvisación sostenido por la narrativa y el ritmo.

Estas conceptualizaciones serán desarrolladas por Havelock (1986) en su "Teoría general de la oralidad primaria". Allí establece las características de un lenguaje que podría definirse como "un habla ritualizada, un lenguaje tradicional que de alguna manera se hace formalmente repetible como un ritual en el que las palabras permanecen en un orden fijado."

Havelock presta especial atención al ritmo como elemento primordial que permite el almacenamiento, la memorización, pero que además está en la base de todos los placeres, fisiológicos e intelectuales. Esta preponderancia del ritmo se da en el plano acústico, pero producirá un efecto secundario: un ritmo semántico, lógico.

Esta idea de ritmo está sostenida por el eco, o sea una "diferencia contenida dentro de lo mismo" que se da entonces en el plano del significante pero también en correspondencia con lo temático. Otra característica destacada es la presencia del verso formulario, "pieza de lenguaje de almacenamiento".

Las fórmulas, los epítetos estandarizados eran auxiliares de primer orden para "ayudar a la improvisación, llenando los intervalos métricos para permitirle al bardo mantener el hilo del relato".

Por otro lado, no es de menor importancia la forma narrativa de los relatos o sea una primacía de hechos sobre conceptos o reflexiones. Havelock señala claramente esto cuando dice: "El hecho más fundamental de su operación lingüística es que todos los sujetos de enunciados deben ser narrativizados, es decir, que deben ser nombres de agentes que hacen cosas, trátese de verdaderas personas o de otras fuerzas personificadas. Los predicados a los que se vinculan deben ser predicados de acción o de una situación presente en la acción, jamás de esencia ni de existencia."

La suma de narratividad y ritmo determina una sintaxis particular o parataxis con ausencia marcada de proposiciones subordinadas y abundancia de conectores coordinantes. Así se creó un lenguaje pleno de dinamismo y fluidez, concreto, interesado por detalles y particularidades. Estas propiedades justamente fueron las que Platón intentó soslayar al querer desterrar a los poetas, en el Libro Décimo de La República. En ellos veía a una forma de pensar que no era la suya, la de la prosa, sino la palabra de la poesía, que "hiere al oído" y que nos presenta a los hombres entregados a la pasión y no a la ley.

Para Platón la poesía no es capaz de expresar la verdad, su expresión es fantasmal. Además, el oyente no puede evitar la empatía, la conmoción que el canto le produce, emociones que no pueden de ninguna manera dar paso a la razón, a la filosofía.

La oralidad habla siempre de un devenir, despliega los acontecimientos, no se siente cómoda en los estáticos mundos del ser, en los predicados de los conceptos que remiten a clases y propiedades y no a acciones : "Su sintaxis siempre debe estar dirigida a describir una acción o una pasión, y no principios ni conceptos."

Los etnólogos han podido constatar estos principios que conforman la Teoría de la Oralidad Primaria en distintos trabajos de campo realizados en etnias, como los Ilongot de Filipinas o los Wana de Indonesia, cuyos discursos orales utilizados en diversas prácticas sociales como casamientos, negocios, rituales religiosos, fiestas, etc. están instrumentados a partir de narraciones que responden a ritmos yámbicos, con abundantes símiles, metáforas y formulas codificadas.

Otra característica esencial del lenguaje oral es la contextualización, o sea la influencia relevante que el contexto, actualizado por los deícticos, los signos indiciales, tiene necesariamente para hacer comprensibles los discuros propios de la oralidad. El paso a la tradición occidental del pensamiento escrito está marcado justamente por el paso dado desde la contextualización a la descontextualización : "Descontextualizar es manejar la información de manera de desconectar otra información o bien relegarla a segundo plano"

Los cambios ocurridos en Grecia a partir de Platón instauran el pensamiento descontextualizado que será la base de los razonamientos deductivos, pensados justamente para darse sin necesidad alguna de conexión a nada que esté fuera de sí. Así la tradición occidental sentará las bases de su cultura escrita con bajo nivel de contextualización.

En el plano sintáctico la descontextualización estará relacionado con la reducción progresiva de la coordinación, que como ya dijimos, es propia del pensamiento y la expresión oral, y el consiguiente aumento de la subordinación: " Las oraciones subordinadas constituyen un tipo de descontextualización en la cual la información es parcialmente separada por vía de ser puesta en segundo plano. Las estructuras aditivas en cambio, otorgan igual peso a todas las informaciones, de modo que cada una de ellas sirve de contexto a las demás."

La integración es otra propiedad del discurso oral, entendida como una ausencia de diferenciacion o distinción entre lo dado y su interpretación : "En el habla, por consiguiente, los oyentes perciben la forma y el significado como indisolublemente unidos".

Con el desarrollo de la escritura poco a poco se irá fijando la capacidad de distinción entre hechos y conceptos, dando por resultado el nacimiento de la ciencia moderna.

La primacia de lo espacial es propio también de la oralidad. Este concepto es desarrollado en algunos estudios relacionados con el Rigveda ( aprox. 1500 A.C.). La espacialidad esta íntimamente relacionada con la contextualización y está evidenciada por la gran cantidad de deícticos presentes en los relatos. Tal como fuera señalado anteriormente. Esta primacia de lo espacial está relacionada con el concepto de integración : "Nuestra capacidad para integrar, es decir, para percibir gestalts, para advertir y combinar patrones, para esquematizar y demás, son muy superiores en el dominio espacial que en el temporal".

Todas estas características apuntadas respecto del lenguaje de la oralidad nos permiten finalmente decir que el discurso oral está compuesto en gran parte por elementos extensionales : "Definimos los elementos extensionales de una lengua como aquellos que hacen referencia a los fenómenos del mundo real extralingüísticos. Son los términos que permiten que las proposiciones lingüísticas sean respecto de algo. A los elementos intensionales, en cambio, los definimos como entidades que no hacen referencia a nada fuera del sistema lingüístico mismo. Sus significados se encuentran dentro de la propia gramática".

En síntesis, los elementos propios de las expresiones orales que podrían encuadrarse en la Teoría de la Oralidad Primaria son los siguientes:

  • primacía de lo narrativo

  • claúsulas rítmicas

  • fórmulas estandarizadas, lenguaje de almacenamiento

  • predominio de verbos motrices o de movimiento

  • presencia constante del eco, la repetición

  • preferencia por lo acumulativo,lo agregativo.

  • lenguaje contextualizado

  • predomino de deícticos, del nivel indicial

  • espacialidad

  • integración

  • extensionalidad

  • empatía, identificación emocional

Estas características propias del lenguaje oral no desaparecerán del todo con el avance de la escritura, y durante muchos siglos convivirán ambos sistemas. Es más, la escritura en muchos aspectos depende del sistema primario de la lengua hablada. Esta dependencia explica la importancia dada a la Retórica desde las épocas clásicas."En Occidente, entre los antiguos griegos, la fascinación se manifestó en la elaboración del arte minuciosamente elaborado y vasto de la retórica, la materia académica más completa de toda la cultura occidental durante dos mil años. En el original, tecnhé rhétoriké, "arte de hablar" (por lo común abreviado a solo rhétoriké ), en esencia se refería al discurso oral..."

La Retórica, con sus figuras y sus formulas tan codificadas, permitían, paradojalmente, que el discurso oral fuera fluído, dinámico, capaz de sostenerse a sí mismo mediante la improvisación, sin necesidad de la escritura. Ong (1982) destacará, justamente, la psicodinámica de la oralidad, ajustando las ideas de Parry, Havelock y otros, relacionándolas con el pensamiento, la memoria, la psicología y la expresión, no sólo oral sino tambien escrita.

La Psicodinámica de la oralidad tiende a poseer entonces las siguientes características en su pensamiento y expresión:

  • Acumulativas antes que subordinadas

  • Acumulativas antes que analíticas

  • Redundantes o "copiosos"

  • Conservadoras y tradicionalistas

  • Cerca del mundo humano vital

  • De matices agonísticos

  • Empáticas y participantes antes que objetivamente apartadas

  • Homeostáticas

  • Situacionales ante que abstractas

Ong destaca a partir de estas características el papel de la oralidad presente en el seno de la vida de los pueblos, a través de sus figuras heroicas : "La memoria oral funciona eficazmente con los grandes personajes cuyas proezas sean gloriosas, memorables y, por lo común, públicas".

La idea de lo glorioso, de lo que merece recordarse, de las proezas que además son públicas, es decir que pertenecen radicalmente al pueblo relacionan a la oralidad con la comunidad y también con lo sagrado : "La fuerza de la palabra oral para interiorizar se relaciona de una manera especial con lo sagrado, con las preocupaciones fundamentales de la existencia. En la mayoría de las religiones, la palabra hablada es parte integral en la vida ritual y devota."

Estos mismas características presentes en las producciones de los pueblos de cultura oral, pre- y post-escriturales están presentes también en la actualidad, especialmente potenciadas por los medios masivos de comunicación, tal como lo pensó McLuhan. Vemos entonces cómo a pesar del prestigio de la escritura la oralidad ha sido revalorizada en el imaginario social : "El que proclama resulta una persona verdaderamente importante en numerosas sociedades y también en la nuestra (si tenemos en cuenta algunas teorías mediático-sociológicas, parecería que es la persona más importante) en cuanto a popularidad e influencia. Piénsese en los políticos y otros actores de los medios, cantantes, etc."

Esta oralidad secundaria, como la denomina Ong ,convive en nuestros días con la cultura escrita, pero día a día se potencia debido a los avances de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

"Al mismo tiempo, con el teléfono, la radio, la televisión y varias clases de cintas sonoras, la tecnología electrónica nos ha conducido a la era de la "oralidad secundaria". Esta nueva oralidad posee asombrosas similitudes con la antigua en cuanto a su mística de la participación, su insistencia en un sentido comunitario, su concentración en el momento presente, e incluso su empleo de fórmulas."

Dependiente de la escritura y de lo impreso, la oralidad secundaria se instala sin embargo en el seno de las sociedades modernas, y si bien no es fácil advertir a veces su presencia, en la medida en que identificamos sus características y las contextualizamos, vemos como aún vibran "las palabras aladas" de Homero y se filtran en los discursos de la radio y la televisión.

El relato radial de los partidos de fútbol, discurso oral de gran popularidad, ocupa gran cantidad de horas semanales en la mayoría de las emisoras y posee muchas de las características apuntadas más arriba.

Cada una de estas variables apuntadas puede ser ejemplificada con relatos radiales, a los cuales tomaremos como unidades de análisis.

NOTA: Sería interesante realizar un análisis sobre los efectos del mercado y la publicidad en los relatos radiales de los partidos de futbol.


miércoles, 30 de abril de 2008

BLOG y FORO

BLOG

Un blog, o en español también una bitácora, es un sitio web periódicamente actualizado que recopila cronológicamente textos o artículos de uno o varios autores, apareciendo primero el más reciente, donde el autor conserva siempre la libertad de dejar publicado lo que crea pertinente. El término blog proviene de las palabras web y log ('log' en inglés = diario).Habitualmente, en cada artículo de un blog, los lectores pueden escribir sus comentarios y el autor darles respuesta, de forma que es posible establecer un diálogo. No obstante es necesario precisar que ésta es una opción que depende de la decisión que tome al respecto el autor del blog, pues las herramientas permiten diseñar blogs en los cuales no todos los internautas -o incluso ninguno- puedan participar.

www.pfpmodelolomas.blogspot.com/

FORO

Los foros en Internet son también conocidos como foros de mensajes, de opinión o foros de discusión y son una aplicación web que le da soporte a discusiones u opiniones en línea. Son los descendientes modernos de los sistema de noticias BBS (Bulletin Board System) y Usenet, muy populares en los años 1980 y 1990. Por lo general los foros en Internet existen como un complemento a un sitio web invitando a los usuarios a discutir o compartir información relevante a la temática del sitio, en discusión libre e informal, con lo cual se llega a formar una comunidad en torno a un interés común. Las discusiones suelen ser moderadas por un coordinador o dinamizador quien generalmente introduce el tema, formula la primera pregunta, estimula y guía, sin presionar, otorga la palabra, pide fundamentaciones y explicaciones y sintetiza lo expuesto antes de cerrar la discusión.

www.usuarios.lycos.es/unlzeducacion

MAIL

Para contactarme por correo pueden hacerlo a gabrielalfi@hotmail.com